En el sistema de construcción Light Steel Frame, uno de los componentes utilizados en las estructuras y como sustrato en entrepisos es la placa OSB (Oriented Strand Board). Es un tablero compuesto por hebras de madera orientadas en capas perpendiculares, unidas mediante resinas y prensado a alta temperatura que le da resistencia multidireccional, lo cual la diferencia de la madera natural cuya resistencia depende en gran medida de la orientación de sus vetas.
Se considera un producto industrializado y normalizado: cada placa OSB es prácticamente igual a otra con comportamiento estructural homogéneo y predecible. Esta normalización es una ventaja importante frente a la construcción húmeda cuyos materiales dependen del proceso artesanal, como por ejemplo el concreto vaciado en obra, tiene procesos previos para obtener el producto final, como la dosificación, tiempo del mezclado, el tiempo de fraguado y las condiciones ambientales, todas estas variabilidades pueden alterar significativamente el producto final, incluso con un buen control de obra.
Sin embargo, la OSB no es un material infalible. es sensible al agua: si se moja y no logra secarse adecuadamente, inevitablemente se deteriora.
En el sistema Steel Frame, donde su rol es estructural, es un riesgo que se resuelve con una correcta aplicación de la membrana barrera de agua y aire de alta calidad tipo Tyvek, y con una ejecución técnicamente rigurosa. Cada encuentro (jambas, aleros, muros a diferentes alturas) deben garantizar estanqueidad durante toda la vida útil de la edificación.
Por otro lado, la masificación del Steel Frame aún está en sus primeras etapas. En muchos casos, no existe oferta de mano de obra calificada ni proveedores que comprendan el sistema como un todo. La actual ejecución tiende a replicar lógicas y procesos de la construcción húmeda, que no aplican cuando se trabaja en el Light Steel Frame, con materiales que exigen precisión, sellado y control ambiental desde el diseño.

Más allá de su potencial, la OSB no es como un producto aislado, sino como parte de un sistema que exige conocimiento técnico, normativa clara y formación especializada. Su adopción exitosa no depende del producto, sino del nivel de preparación del mercado para instalarlo correctamente, protegerlo y mantenerlo operativo en el tiempo.
Promover el uso responsable de este tipo de materiales no implica desalentar la innovación. Al contrario, es reconocer que el desarrollo del Steel Frame en el Perú requiere algo más que importación de productos: demanda transferencia de técnica y conocimiento, fortalecimiento del ecosistema técnico, adaptación normativa y estándares de ejecución verificables. Solo así se evitará que soluciones prometedoras se conviertan en riesgos ocultos. Es momento de que proveedores, constructores y reguladores asuman ese reto de manera conjunta.